domingo, 8 de julio de 2007

El infierno


Al mismo tiempo que se cruzaron nuestras miradas también se dibujo una leve sonrisa en su rostro.

Había brillado un rayo de sol en aquella patética estampa de seres encerrados en una prisión invisible.

Quizas las dos únicas mentes despejadas del lugar pensé, mientras ante mi se cruzada la principal candidata al titulo de Miss Metadona arrastrando su esqueleto con unas pesadas botas militares, intentaba enfrascarme en el suplemente que tenia en mis manos pero, aquella mujer (unos treinta años, ojos verdes, carnosos labios, morena melena rizada). Había captado mi atención en aquella tensa sala.

Volví a observarla, llamaba la atención, por que visto desde fuera parecía tenerlo todo para ser feliz belleza, y posiblemente (observando su ropa y complementos) una buena situación económica… mientras mi mente jugaba a imaginar su realidad cotidiana, solo un excesivo nerviosismo la hacia parecer digna de una palaza en la lista de los condenados.
El infierno no entiende de clases sociales, sexos o edades. No necesita causas para presentarse., pero sí ayuda para salir de el…

La sociedad actual es un monstruo, que todos en mayor o menor medida alimentamos, y que termina por devorarnos.

Todo el mundo sabe que el dinero no da la felicidad, la puede alquilar unos días, meses o quizás años, pero….. las apariencias engañan, y sin embargo seguimos viviendo en una sociedad de apariencia, donde prima la imagen externa, tanto personal, como social.

Vale más tu imagen que tu interior, seguimos fomentando que lo mejor es ser cool, gente guapa, con chalet y cochazo y vacaciones de alto standing.

Pero la felicidad es muy difícil de conseguir, por no decir imposible, porque la felicidad en si es un estado transitorio. Lo importante es conseguir la serenidad, la paz interior, y para eso hay que aceptarse como uno es, comprender tus limitaciones y tener otros valores, comenzar la ardua tarea de búsqueda de la serenidad personal y más con la cantidad de estímulos externos dañinos a los que estamos sometidos.

El infierno es un cúmulo de situaciones que llega un momento que no puedes controlar, piensas que estas bien, que puedes con todo y un día te levantas tan normal y piensas que el día será igual a otros, acabas topándote con la realidad y te das cuenta que tu vida es rutina y no tiene sentido, tu mente te dice que necesitas escapar, cambiar tus hábitos, pero te entra el miedo y es una lucha continua entre lo que debes hacer y lo que quieres hacer, ya que lo material no te llena y de repente te sientes inmerso en una cárcel mental, que te bloquea, anula tu voluntad y empiezas a luchar contra tu otro yo, intentando salir a la superficie, necesitas huir pero no es sencillo, es una lucha en el fango ….. dura, sucia y silenciosa…. Ya que solo tu puedes reivindicar tu libertad de volver a ser tu mismo.

Pero yo estaba igual, absorto en mis fabulaciones , olvidando que yo estaba también allí, como un representante mas de ese infernal mundo de zombis, ayudado por mi pastilla roja… uno mas de los que desbordan lo centros medico con el ABCD de la medicina moderna;

Anorexia, Bulimia, Cocaína, Depresión

Pero perdí el miedo, mi corazón ya no pelea por salir de mi pecho y ha dejado de ser una puta tortura el simple hecho de estar consciente, Esto solo se entiende quien lo padece… yo como ella estoy aquí en la antesala del infierno buscando la puerta de salida…..
Y como premio mi loquero me regala un cambio cromático…..

Ahora, la pastilla blanca!!!!!




"... defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardíacos
de las endemias y las academias..."

(DEFENSA DE LA ALEGRÍA, Mario Benededetti)

La perla del día;

Casi todo lo que realice será insignificante, pero es muy importante que lo haga.¨
(Gandhi)